Introducción

¿QUIÉN ES UN CÓNSUL (ESFJ)?

Un Cónsul (ESFJ) es una persona con los rasgos de personalidad Extrovertido, Observador, Emotivo y Juzgador. Son atentos y centrados en las personas, y disfrutan participando en su comunidad social. Sus logros están guiados por valores decisivos y están dispuestos a ofrecer orientación a los demás.

Anímense, anímense y fortalézcanse unos a otros. Porque la energía positiva que se transmite a uno la sentiremos todos. DÍA DE DEBORAH

Para los cónsules, la vida es más dulce cuando se comparte con los demás. Las personas con este tipo de personalidad forman la base de muchas comunidades, abriendo sus hogares y sus corazones a amigos, seres queridos y vecinos.

Esto no quiere decir que a los cónsules les guste todo el mundo, o que sean santos. Pero los cónsules sí creen en el poder de la hospitalidad y los buenos modales, y tienden a tener un sentido del deber hacia quienes los rodean. Generosas y confiables, las personas con este tipo de personalidad a menudo se encargan de mantener unidas a sus familias y comunidades, tanto en formas grandes como pequeñas.

Los cónsules tienen talento para hacer que las personas en sus vidas se sientan apoyadas, cuidadas y seguras.

La belleza de una vida responsable

Los cónsules son altruistas. Se toman en serio sus responsabilidades de retribuir, servir a los demás y hacer lo correcto.

Y los cónsules creen que hay algo claro que hacer en casi todas las situaciones. Si bien algunos tipos de personalidad adoptan una actitud más indulgente, de vivir y dejar vivir, a los cónsules les puede resultar difícil no juzgar cuando alguien toma un camino que les parece equivocado. Como resultado, los cónsules a menudo luchan por aceptar cuando alguien, especialmente alguien que les importa, no está de acuerdo con ellos.

Los cónsules tienen una brújula moral clara, y puede ser poco menos que desconcertante para ellos cuando las acciones de otras personas no se alinean con ella.

Con sus puntos de vista definidos sobre el bien y el mal, los cónsules tienden a estar del lado de las opiniones. Pero estas opiniones no son arbitrarias, a menudo se basan en un profundo respeto por la tradición. Los cónsules saben que todo lo que hacen afecta a otra persona, y confían en que las leyes, los protocolos y las normas sociales establecidos los ayudarán a navegar su vida cotidiana de una manera considerada y responsable hacia los demás.

Construyendo relaciones que duran

Solidarios y extrovertidos, los cónsules siempre se pueden ver en una fiesta: ¡son los que revolotean para asegurarse de que todos los demás se diviertan! Pero no se equivoque: los cónsules no solo pasan por la vida de otras personas. Leales hasta la médula, construyen relaciones duraderas y se puede contar con ellos para que aparezcan siempre que se necesite una mano amiga o un oído atento.

Los cónsules rara vez se pierden un cumpleaños o un día festivo. Dedicados a sus relaciones, recuerdan hasta el más mínimo detalle de la vida de sus amigos y seres queridos.

Con su amor por el orden y la estructura, los cónsules prefieren eventos planificados a actividades abiertas o reuniones espontáneas, y están felices de ser anfitriones para asegurarse de que todo salga bien. Las personas con este tipo de personalidad ponen mucha energía en hacer que otras personas se sientan especiales y celebradas, y pueden tomarlo como algo personal cuando alguien no parece apreciar sus esfuerzos.

Para muchas personas con el tipo de personalidad Cónsul, uno de los mayores desafíos de la vida es aceptar que no pueden controlar los pensamientos o el comportamiento de nadie más, ni siquiera de aquellos que son más cercanos y queridos para ellos. Afortunadamente, los cónsules pueden encontrar paz y satisfacción enfocándose en lo que mejor saben hacer: dar un ejemplo de cuidado, consideración y responsabilidad, y unir a las personas en el proceso.

Fortalezas debilidades

Fortalezas del cónsul

• Fuertes habilidades prácticas : los cónsules son excelentes administradores de las tareas diarias y el mantenimiento de rutina, y disfrutan asegurándose de que las personas cercanas a ellos estén bien atendidas.
• Fuerte sentido del deber : las personas con el tipo de personalidad Cónsul tienen un fuerte sentido de la responsabilidad y se esfuerzan por cumplir con sus obligaciones, aunque a veces esto puede deberse más a un sentido de expectativas sociales que a un impulso intrínseco.
• Muy leales : los cónsules valoran mucho la estabilidad y la seguridad y están ansiosos por preservar el statu quo, lo que los convierte en socios y empleados extremadamente leales y confiables. Los cónsules son verdaderos pilares de cualquier grupo al que pertenezcan, ya sea su familia o un club comunitario, siempre se puede confiar en las personas con este tipo de personalidad.
• Sensible y cálido: al ayudar a garantizar esa estabilidad, las personalidades de los cónsul buscan la armonía y se preocupan profundamente por los sentimientos de otras personas, teniendo cuidado de no ofender ni lastimar a nadie. Los cónsules son fuertes jugadores de equipo, y las situaciones en las que todos ganan son de lo que están hechas las sonrisas.
• Bueno para conectarse con los demás: estas cualidades se unen para hacer que los cónsules sean sociables, cómodos y queridos. Las personalidades de los cónsules tienen una fuerte necesidad de “pertenecer” y no tienen problema con las conversaciones triviales o seguir las señales sociales para ayudarlos a desempeñar un papel activo en sus comunidades.

Debilidades del cónsul

• Preocupados por su estatus social : estas fortalezas están relacionadas con una debilidad principal: la preocupación de los cónsules por el estatus social y la influencia, que afecta muchas decisiones que toman, lo que potencialmente limita su creatividad y apertura mental.
• Inflexibles: los cónsules dan mucha importancia a lo que es socialmente aceptable y pueden ser muy cautelosos, incluso críticos con cualquier cosa que no sea convencional o esté fuera de lo común. Las personas con este tipo de personalidad a veces también pueden presionar demasiado sus propias creencias en un esfuerzo por establecerlas como la corriente principal.
• Reacios a innovar o improvisar: así como pueden criticar el comportamiento “inusual” de los demás, los cónsules también pueden no estar dispuestos a salir de sus propias zonas de confort, generalmente por temor a ser (o simplemente parecer) diferentes.
• Vulnerable a las críticas : puede ser especialmente difícil cambiar estas tendencias porque los cónsules son muy reacios a los conflictos. Las personalidades de los cónsules pueden ponerse muy a la defensiva y lastimarse si alguien, especialmente una persona cercana a ellos, critica sus hábitos, creencias o tradiciones.
• A menudo demasiado necesitados : los cónsules necesitan escuchar y ver una gran cantidad de aprecio. Si sus esfuerzos pasan desapercibidos, las personas con el tipo de personalidad de Cónsul pueden comenzar a buscar cumplidos, en un intento de asegurarse de cuánto los valoran.
• Demasiado desinteresado : el otro lado de esto es que los cónsules a veces intentan establecer su valor con atención cariñosa, algo que puede abrumar rápidamente a aquellos que no lo necesitan, lo que en última instancia hace que no sea bienvenido. Además, los cónsules a menudo descuidan sus propias necesidades en el proceso.

Relaciones románticas

Valorando tanto la validación social y el sentido de pertenencia, las relaciones románticas tienen un nivel especial de importancia para los cónsules. Ningún otro tipo de relación brinda a las personas con el tipo de personalidad Cónsul el mismo nivel de apoyo y devoción, y los sentimientos de seguridad y estabilidad que acompañan a las relaciones románticas sólidas son extremadamente cálidos.

Los cónsules no tienen aventuras casuales: necesitan saber que sus parejas siempre estarán a su lado ofreciéndoles un apoyo inquebrantable, y el matrimonio y la familia son el objetivo final.

Con ese objetivo en mente, las personalidades de Consul se toman muy en serio cada etapa, desde las citas hasta todo lo que sigue. Todo en las relaciones de los cónsules se basa en la satisfacción de las necesidades mutuas, desde la creación de un entendimiento desde el principio hasta la construcción del respeto mutuo y el apoyo a las opiniones y objetivos de los demás. Saber que son amados y apreciados tiene un gran efecto en el estado de ánimo y la autoestima de los cónsules.

Un Corazón Tierno

Si sienten que este apoyo no está ahí, como cuando sus socios critican, los cónsules pueden sentirse extremadamente heridos. A las personas con el tipo de personalidad de Cónsul no les gustan los conflictos ni las críticas, lo que puede dificultar la solución de cualquier problema que surja. Nada es más doloroso o deprimente para los cónsules que darse cuenta de que sus parejas no respetan sus sueños u opiniones. Los cónsules pueden ser sorprendentemente duros e incansables frente a las dificultades, pero necesitan saber sin lugar a dudas que sus socios los respaldan al 100%.

Desafortunadamente, los cónsules menos maduros pueden carecer de la fuerza interior y la sabiduría para atraer esto de manera saludable. Pueden ser muy necesitados, comprometiendo sus propios principios y valores a cambio de la aprobación de sus socios. Esta es una trampa terrible: no solo es poco atractiva, sino que también puede conducir fácilmente a relaciones emocionalmente abusivas, lo que reduce aún más la autoestima de los cónsules. Otra trampa es su fijación por el estatus social y la aprobación: no es raro que los círculos sociales y los familiares de los cónsules desempeñen un papel más importante en la elección de sus parejas para salir con alguien que incluso sus propios valores.

Cultivando la confianza

Los cónsules son personas cálidas y leales que quieren sentirse confiables y valoradas. Son excelentes en asuntos prácticos como la administración del dinero y las tareas administrativas, y están felices de asumir tales responsabilidades en nombre de cuidar a las personas que les importan, una cualidad maravillosa. Los cónsules solo deben asegurarse de tomarse el tiempo para asegurarse de construir relaciones que les permitan satisfacer sus propias necesidades y sueños, con socios que aprecien plenamente su cuidado y generosidad, y que también correspondan.

Los cónsules a menudo son muy organizados en la forma en que se desarrollan sus relaciones, siguiendo las reglas y tradiciones de citas establecidas (no llamar a la primera, tercera cita, etc.). A medida que sus relaciones entran en etapas más sexuales, el énfasis de los cónsules en el proceso y la tradición continúa con roles de género establecidos y actividades socialmente aceptables.

Sin embargo, dado que los cónsules están tan centrados en el mundo físico y son bastante emocionales, tienden a ser muy cariñosos y sensuales y, en general, excelentes compañeros sexuales. A las personas con este tipo de personalidad les encanta encontrar formas de hacer felices a sus parejas, y este tipo de intimidad es una excelente manera de hacerlo. A medida que los dos socios se sienten más cómodos el uno con el otro, los cónsules a menudo están abiertos a experimentar y probar cosas nuevas, siempre que sus socios estén dispuestos a corresponder.

Los cónsules tienen necesidades específicas para sus relaciones, y ciertos tipos de personalidad son los que mejor pueden satisfacer esas necesidades. En general, los socios deben compartir el rasgo Observador (S) de los Cónsules, pero también puede ser útil para desarrollar un sentido de introspección que los socios Introvertidos (I) pueden proporcionar, con tal vez un rasgo opuesto más para ayudar a los Cónsules a enfocarse en decisiones lógicas cuando sea apropiado. , o tener una mente más abierta en situaciones nuevas.

Amistades

Los cónsules son un tipo de personalidad muy social, buscan grandes círculos de amigos y demuestran estar más que dispuestos a gastar el tiempo y la energía necesarios para mantener estas relaciones. Leales y cálidos, los cónsules son conocidos por apoyar a sus amigos sin importar lo que pase y brindar una fuente constante de apoyo emocional y aliento.

Las personalidades de los cónsules también son sensibles a las tradiciones de la amistad y ven el apoyo que ofrecen tanto como una responsabilidad como un placer.

Haciendo todo lo posible para asegurarse de que sus amigos estén felices y sintiéndose tan cómodos con las presentaciones y las conversaciones triviales, los cónsules son, naturalmente, muy populares en casi cualquier entorno. Esta es una dinámica que los cónsules disfrutan genuinamente, pero también esperan que sus esfuerzos y apoyo sean recíprocos. No hay nada tan hiriente para las personas con el tipo de personalidad Cónsul como descubrir que un amigo de confianza critica sus creencias o hábitos, excepto tal vez que se lo digan en una confrontación directa.

Los cónsules tienden a creer que sus amigos no pueden hacer nada malo, siempre dando un paso al frente para defenderlos sin importar las circunstancias, y esperan el mismo beneficio de la duda a cambio. Los cónsules pueden ampliar en gran medida su círculo de amigos si aprenden a ser más receptivos a otras perspectivas, en lugar de emitir juicios y conclusiones precipitados. Es importante que los cónsules, como cualquier otra persona, eviten aislarse de otros puntos de vista y opiniones, para relacionarse y comprender a cada vez más personas.

Todos estamos juntos en esto

Por otro lado, los cónsules son excelentes para usar su sensibilidad para mantenerse en sintonía con lo que motiva e impulsa a sus amigos. Mientras que en sus momentos más débiles, las personalidades de Cónsul a veces pueden usar estas observaciones para manipular a otros, están mucho más interesados ​​en mantener relaciones sólidas, y esta es una gran herramienta para hacerlo. Altruistas como son, los cónsules casi siempre usan sus poderes para el bien, alentando e inspirando a otros.

En general, el tipo de personalidad de Cónsul es agradable y sincero. Su energía e inteligencia social les hacen ganar muchos conocidos y amigos, y su apoyo y dedicación mantienen esas amistades cercanas y fuertes. Con tanto entusiasmo por la vida y la compañía, los momentos aburridos seguramente serán pocos y distantes entre sí.

Paternidad

Como padres, los cónsules tienen una excelente oportunidad de mostrar su calidez, afecto y dedicación de manera que tengan un impacto real y positivo. Sensible pero firme, los padres Cónsul son capaces de establecer reglas y autoridad sin ser del todo autoritarios, usando su compasión y apoyo para suavizar la falta de comunicación ocasional o la diferencia de opinión.

Tener hijos es a menudo la culminación de los objetivos de vida de los cónsules, y aprecian cada momento.

Desde el principio, los cónsules intentan que sus hijos se sientan seguros y felices. Las personas con el tipo de personalidad Cónsul disfrutan del apoyo que pueden brindar a sus bebés, quienes dependen por completo de su cuidado. Siendo la familia tan importante como lo es para los cónsules, este es un comienzo increíblemente gratificante para la relación.

Protective or Over-Protective?

A medida que sus hijos crecen y comienzan a explorar más, el amor y el cuidado de los cónsules crecen con ellos, pero a menudo se vuelven sobreprotectores. Es posible que los cónsules no solo mantengan a sus hijos seguros físicamente, sino también socialmente, organizando citas para jugar, campamentos y otras actividades de tal manera que sus hijos no sean libres de cometer los errores que conducen al crecimiento emocional y la independencia social.

Los cónsules valoran mucho la armonía y la estabilidad y, a menudo, intentan utilizar la presión indirecta para tratar de enseñar lecciones de vida. Sin embargo, cuando se ven obligados a una confrontación por las flagrantes malas acciones de sus hijos, los padres de Cónsul intervienen con firmeza y esperan que se respeten sus palabras. Creyentes en los roles tradicionales, los padres cónsul ven la relación padre-hijo en términos de blanco y negro, con su autoridad como definitiva.

El regalo de la independencia

A medida que sus hijos llegan a la adolescencia y comienzan a alejarse de sus padres, los cónsules pueden tomar esta transición como algo personal. Al sentir que están perdiendo a sus hijos, las personalidades de los cónsules a veces intentan prolongar su dependencia el mayor tiempo posible. Es importante recordar que cuando los hijos adultos dejan el hogar, es porque sus padres lograron prepararlos para la siguiente fase de sus vidas, un logro del que los cónsules pueden estar orgullosos.

Los hijos de los cónsules siempre apreciarán la sensibilidad y la calidez con la que fueron criados, y a medida que pase el tiempo y tengan sus propios hijos, apreciarán el hecho de que esos niños tienen el beneficio de los abuelos que los aman y cuidan incondicionalmente.

Trayectoria de carrera

Debido a que los rasgos de los cónsules se expresan con tanta fuerza, liderando con sentido práctico y vigor social, las carreras que encuentran más satisfactorias generalmente giran en torno a hacer el mejor uso de estas cualidades. Los cónsules están bien organizados, disfrutan poniendo orden y estructura en sus lugares de trabajo y, a menudo, trabajan mejor en entornos con jerarquías y tareas claras y predecibles. La monotonía y el trabajo rutinario no son un desafío para el tipo de personalidad Cónsul, ya que están felices de hacer lo que hay que hacer.

Motivaciones altruistas

Las carreras como administradores encajan naturalmente, lo que permite a los cónsules organizar no solo un entorno, sino también a las personas que lo integran. Sus habilidades prácticas se combinan bien con su confiabilidad, lo que hace que las personalidades de los cónsul sean sorprendentemente buenos contadores, aunque a menudo prefieren ser contadores personales, ayudando a las personas e interactuando con ellas directamente, en lugar de contadores corporativos procesando números en algún cuarto trasero.

Sin embargo, las carreras puramente analíticas a menudo son demasiado aburridas para los cónsules: necesitan interacción humana y retroalimentación emocional para estar verdaderamente satisfechos en su línea de trabajo. Buenos oyentes y entusiastas miembros del equipo, las personas con el tipo de personalidad Cónsul son excelentes proveedores de atención médica y trabajo social. La enseñanza es otra gran opción, ya que los cónsules se sienten cómodos con la autoridad, pero son lo suficientemente solidarios y amistosos como para evitar que esa autoridad se sienta autoritaria.

Las mejores carreras de los cónsules tienen el beneficio adicional de brindarles quizás su requisito más importante: sentirse apreciados y saber que han ayudado a alguien.

Siendo tan altruistas como son, a los cónsules les resulta difícil estar satisfechos a menos que sepan que han hecho algo valioso por otra persona. Esta es a menudo la fuerza impulsora detrás de las carreras y el avance profesional de los cónsules, y hace que el trabajo religioso y el asesoramiento sean particularmente gratificantes.

Independientemente de lo que elijan hacer, la comodidad de las personalidades de Consul con situaciones sociales ocupadas y el conocimiento y las habilidades prácticas se unen para crear personas que no solo pueden ser productivas y útiles, sino personas que realmente lo disfrutan.

Hábitos en el lugar de trabajo

Cuando se trata del lugar de trabajo, los cónsules tienen tendencias claras que se manifiestan independientemente de su posición. Las personas con el tipo de personalidad Cónsul prosperan en el orden social y la armonía, y usan su calidez e inteligencia social para asegurarse de que cada persona conozca sus responsabilidades y pueda hacer lo que debe hacerse. Los cónsules se sienten cómodos, incluso dependen de jerarquías y roles claros, y ya sean subordinados, colegas o gerentes, las personalidades de los cónsules esperan que la autoridad sea respetada y respaldada por reglas y estándares.

Subordinados del cónsul

Con responsabilidades claramente definidas y un sentido de propósito, los cónsules son personas pacientes, eficientes y trabajadoras que respetan la autoridad de sus gerentes. Si bien los cónsules pueden tener problemas con demasiada libertad e improvisación, prosperan en lugares de trabajo con estructura, seguridad y pautas. Las tareas rutinarias no son un problema para los Cónsules, y su dedicación y lealtad les ganan el respeto de sus gerentes.

Colegas Cónsules

El trabajo en equipo es un concepto que los Cónsules no tienen problemas en poner en práctica. A menudo buscan amigos en el trabajo, las personas con este tipo de personalidad casi siempre están dispuestas a echar una mano cuando y donde sea necesario. Excelentes creadores de redes, los cónsules siempre parecen “conocer a la persona” para llevar a cabo un proyecto a tiempo. Por otro lado, los cónsules a menudo necesitan trabajar en equipo: estar solos trabajando en el papeleo durante días y días solo los deja cansados e insatisfechos.

Los cónsules se enorgullecen de estas cualidades, lo que tiene el efecto secundario de hacerlos particularmente sensibles cuando son objeto de críticas. Cuando sus sugerencias y ayuda son rechazadas, las personalidades de los cónsules pueden tomárselo como algo personal. Ya algo vulnerables al estrés, los rechazos como estos pueden ser bastante desmoralizantes, y los cónsules pueden necesitar que sus compañeros de trabajo hagan un esfuerzo para expresar su agradecimiento de vez en cuando.

Gerentes de cónsul

Los cónsules disfrutan de la responsabilidad que conlleva la organización de situaciones sociales, y el placer que sienten al dirigir a otras personas se traduce bien en puestos de gestión. Como líderes de equipo, los cónsules encuentran formas de hacer que todos se sientan involucrados, uniendo a las personas y suavizando las relaciones para hacer las cosas.

Al mismo tiempo, los cónsules tienen un gran respeto por las estructuras de poder tradicionales, y si después de todos sus esfuerzos para convencer a sus subordinados de trabajar juntos, alguien termina desafiando su autoridad, pueden estresarse, perder los estribos y, en general, reaccionar mal. Las personas con el tipo de personalidad Cónsul son sensibles a su estatus y no les gustan los conflictos, y prefieren situaciones en las que todos conocen su función. Siempre que las expectativas estén claramente delineadas, los cónsules son gerentes efectivos y agradables.

Conclusión

Pocos tipos de personalidad son tan prácticos y afectuosos como los cónsules. Conocidos por sus habilidades sociales y administrativas, los cónsules son buenos para crear y mantener un entorno seguro, estable y amigable para ellos y sus seres queridos. La dedicación de los cónsules es invaluable en muchas áreas, incluido su propio crecimiento personal.

Sin embargo, los cónsules pueden caer fácilmente en áreas donde su amabilidad y enfoque práctico son más una responsabilidad que una ventaja. Ya sea para encontrar (o mantener) una pareja, aprender a relajarse o improvisar, alcanzar alturas deslumbrantes en la carrera profesional o administrar su carga de trabajo, los cónsules deben hacer un esfuerzo consciente para desarrollar sus rasgos más débiles y habilidades adicionales.

Lo que ha leído hasta ahora es solo una introducción al concepto complejo que es el tipo de personalidad Cónsul. Es posible que hayas murmurado para ti mismo, “wow, esto es tan preciso que es un poco espeluznante” o “¡finalmente, alguien me entiende!” Es posible que incluso haya preguntado “¿cómo saben más sobre mí que las personas más cercanas a mí?”

Esto no es un truco. Te sentiste comprendido porque lo eras. Hemos estudiado cómo piensan los cónsules y qué necesitan para alcanzar su máximo potencial. Y no, no te espiamos: muchos de los desafíos que has enfrentado y enfrentarás en el futuro han sido superados por otros cónsules. Simplemente necesita aprender cómo lo lograron.

Pero para hacer eso, necesitas tener un plan, una hoja de ruta personal. El mejor auto del mundo no te llevará al lugar correcto si no sabes a dónde quieres ir. Le hemos dicho cómo tienden a comportarse los cónsules en determinadas circunstancias y cuáles son sus principales puntos fuertes y débiles. Ahora necesitamos profundizar mucho más en tu tipo de personalidad y responder “¿por qué?”, “¿cómo?” y “¿y si?”

Este conocimiento es solo el comienzo de un viaje de por vida. ¿Estás listo para saber por qué los cónsules actúan de la forma en que lo hacen? ¿Qué te motiva e inspira? ¿A qué le tienes miedo y con qué sueñas en secreto? ¿Cómo puedes desbloquear tu verdadero y excepcional potencial?

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